Jose Velasco Informa
  • Inicio
  • Ultimas noticias
  • San Antonio Arrazola, y Miguel Santiago Soriano pastorean alebrijes en las noches de luna
De los Valles Centrales Ultimas noticias

San Antonio Arrazola, y Miguel Santiago Soriano pastorean alebrijes en las noches de luna

Por: Ezequiel Gomez Leyva.

Texto y fotos: www.agenciaeze.com

En el estado de Oaxaca a cada paso se pueden encontrar artesanías de diferentes tipos, por eso esta ciudad, a pesar de todo, sigue siendo el lugar más atractivo a nivel mundial para visitar, conocer y recorrer, a pie, en coche, en bicicleta, en aeroplano, en globo aerostático, o en parapente, nunca deja uno de sorprenderse. 

Pueblos con una riqueza ancestral, artesanal, culinaria o arqueológica abren los brazos al visitante nacional extranjero y tambien a los locales quienes se dan la oportunidad de conocerlos, 

Un pequeño ejemplo de esta riqueza es  la población de San Antonio Arrazola donde los adultos y pequeños se esfuerzan en conservar un bello oficio que sirve  para demostrar la habilidad de transformación dando como resultado una gran variedad de figuras elaboradas por manos creativas y mentes llenas de imaginación que dan vida a seres fantásticos inimaginables para la mayoría de nosotros. 

Leones con ojos de Búho, tigres con cuernos de dragón, caballos con patas de gallo o guajolotes voladores de colores chillantes, sin contar los rostros deformes de seres no convencionales.

 
Miguel Santiago Soriano es uno de los cientos de talladores de madera en esta comunidad, dispuesto a mostrarnos paso a paso la manera de dar vida a un trozo de madera de copal que selecciona con cuidado a la hora de cortarla o comprarla. 

Los alebrijes cobraran vida -como en la canción los juguetes de Francisco Gabilondo-, y cada noche se puede verlos bailar y conversar entre ellos, cuando los demás duermen, y cuando el sueño más pesado cae sobre los mortales, ellos salen de su letargo para conversar cómo llegaron a este mundo a recrear su vida inerte en el fondo de la inexistencia.

Con patas o sin ellas, con un par de alas o varias en diferentes partes del cuerpo, con ojos inquisidores o colmillos dispuestos a devorar o simplemente con la mirada perdida, cada Alebrije cuenta su historia, recreando un sueño que lo sacó de la inexistencia, quizá bajo el influjo de una noche de luna llena o de una bebida espirituosa o producto del insomnio de una calurosa noche con canto de grillos y aullidos de coyotes, acompañado de los cantos de las sirenas nocturnas vagando en las montañas.

Related posts

Playa la entrega recibe reconocimiento «lo mejor de lo mejor» de Trip Advisor

Redacción

Nombramiento de Sergio García Gabriel es publicado en Periódico Oficial

Redacción

Promueve y resguarda Oaxaca espacios comunitarios para el desarrollo turístico con impacto social

Redacción